Una luminosa vivienda con una cocina a la altura

En esta cocina, el espacio se organiza alrededor de una isla que combina almacenaje, zona de estar y superficie de trabajo. Un ejemplo de cómo una organización inteligente del espacio permite hacer una gran cocina.

En esta cocina, la isla es el centro y corazón del espacio

Zona de almacenaje y electrodomésticos

La zona principal de almacenaje se concentra en un frente que también alberga los electrodomésticos y una pequeña zona de trabajo de apoyo. La combinación de diferentes fondos en los muebles superiores, materiales, colores y texturas crean un espacio de cocina cálido y, sobre todo, funcional.

A pesar de combinar muebles de formatos muy diferentes y electrodomésticos de tamaños y formatos dispares, el diseño de este frente consigue aunar y homogeneizar todos estos elementos.

Para satisfacer todas las necesidades de almacenaje de una familia en una cocina es necesario combinar diferentes tipos de interiores, sistemas de apertura y herrajes. En este caso, la variedad en los tipos de armarios garantizó el orden y la funcionalidad.

Cajones de diferentes formatos y alturas satisfacen todas las demandas de una cocina actual con menaje de formatos muy diferentes y, en muchos casos, de gran formato.

Nuestra condición de fabricantes nos permite comprometernos como nadie más es capaz de hacerlo. En este caso, fuimos más allá del amueblamiento de la cocina y ofrecimos una solución de almacenaje extra en un espacio muy complejo pero con gran potencial debajo del gran ventanal de la estancia.

Zona de cocinado: Una cocina para todo tipo de chefs

La isla alberga la zona de cocinado, que combina placa de inducción y gas. La elección entre placa de inducción o gas puede ser difícil. El primero gana por eficiencia, y el segundo por el sabor de una cocción clásica.

La inducción es una tecnología muy eficiente con un importante punto a su favor: son muy fáciles de limpiar. Sin embargo, el gas también ha evolucionado y ahora se puede controlar de forma totalmente precisa la llama necesaria para cocinar.